Ribera del Júcar

En el corazón de Castilla-La Mancha, la Denominación de Origen Ribera del Júcar se erige como una joya vinícola con una identidad propia y distintiva.

Reconocida oficialmente en 2003, esta joven D.O. abarca siete municipios de la provincia de Cuenca, donde el río Júcar y su microclima particular marcan el carácter de sus vinos.

La protagonista indiscutible de la región es la uva Bobal, una variedad autóctona que aquí encuentra su máxima expresión, ofreciendo vinos tintos y rosados de gran personalidad. Junto a ella, variedades como Tempranillo, Cabernet Sauvignon, Merlot, Syrah y Petit Verdot complementan el panorama, aportando complejidad y matices. Los vinos tintos de Ribera del Júcar son conocidos por su intensa coloración, con predominio de tonos cereza picota y violáceos. En nariz, despliegan aromas frutales profundos, a menudo con notas balsámicas y especiadas, especialmente en aquellos con crianza en barrica. En boca, son carnosos, estructurados y con un final persistente que invita a seguir degustando.