Cloudy Bay: El Pionero del Sauvignon Blanc en Nueva Zelanda
Fundada en 1985 por el visionario David Hohnen, Cloudy Bay no es solo una bodega, sino un pilar fundamental en la historia del vino de Nueva Zelanda. Ubicada en el famoso valle de Wairau, Marlborough, fue una de las cinco primeras bodegas de la región. Su establecimiento marcó un antes y un después, catapultando al Sauvignon Blanc neozelandés a la fama internacional y definiendo el estilo vibrante y aromático que hoy conocemos y que es sinónimo de la más alta calidad en el país.
Cloudy Bay gestiona sus viñedos a lo largo de los valles de Wairau y Awatere con una filosofía que combina precisión, sostenibilidad y respeto por el terroir. Las parcelas se asientan sobre suelos de grava con excelente drenaje, lo que, combinado con el clima marítimo fresco, asegura una maduración lenta y la conservación de la acidez natural. En bodega, la intervención es mínima: utilizan la tecnología para garantizar que la pureza de la fruta hable por sí misma. Esta dedicación resulta en vinos que son un referente mundial de frescura, intensidad, elegancia y capacidad de guarda.
El nombre de la bodega rinde homenaje a la bahía cercana, bautizada por el Capitán Cook en 1770. Si bien su vino insignia es el Sauvignon Blanc, reconocido globalmente por su intensidad herbácea y cítrica, su excelencia se extiende a otras etiquetas aclamadas. Destaca el espumoso Pelorus, que rivaliza con grandes champagnes, el elegante Pinot Noir y el sofisticado Te Koko, un Sauvignon Blanc fermentado en barrica que demuestra la versatilidad y el potencial de guarda de la uva en Marlborough.